La Ruta de la Garnacha en colaboración con la Escuela de Vuelo 1903 permite, a vista de pájaro, descubrir los encantos de su paisaje “garnacha” a bordo de un ultraligero.
Entre las acciones previstas por La Ruta de la Garnacha para mantener su posicionamiento como destino turístico tras la crisis del COVID-19 destacan aquellas que refuerzan experiencias despertando, más que nunca, “emociones”.
Borja, 7 de agosto de 2020. “Soñar, emocionar y enamorar”, objetivos estratégicos de la Asociación para la Promoción Turística de La Ruta de la Garnacha con vistas a seguir reforzando el posicionamiento de su destino turístico a lo largo de este verano y próximo otoño.
Cumpliendo con el mayor deseo de una sociedad que estuvo confinada durante 3 meses: evadirse por un momento de la realidad, La Ruta de la Garnacha lanza una nueva experiencia turística que además de emocionar trata de enamorar al visitante de todo un destino que está trabajando con la plena confianza de que “Lo mejor está por llegar…” tal y como reza la vigente campaña de promoción turística de la Asociación para la Promoción Turística de La Ruta de la Garnacha.
La Ruta de la Garnacha a vista de pájaro
Rudi será nuestro piloto profesional de la Escuela de Vuelo 1903 quien, tras darnos la bienvenida en su aeródromo y presentarnos el ultraligero que nos va a llevar hasta el mismo cielo, dará forma a nuestro sueño guiándonos en un vuelo que nos va a permitir conocer, en buena parte, el paisaje de La Ruta de la Garnacha declarado de Interés Turístico de Aragón.
Sin duda el Moncayo, mágica, colosal y omnipresente montaña, cuya influencia se extiende a la provincia de Zaragoza y Soria, es uno de los grandes reclamos de dicha experiencia. Trasmoz, Vera de Moncayo y el Monasterio de Veruela nos muestran el carácter histórico, artístico y legendario de estas tierras que quedan bajo la influencia de este monte.
Entrando por las inmediaciones de Peñas de Herrera, otras de las bellezas paisajísticas del Parque Natural del Moncayo, sobrevolamos Talamantes, un pueblo con un singular encanto, al pie de un legendario castillo que perteneció a la Orden de San Juan de Jerusalén.
A partir de aquí el visitante podrá ser testigo de un cambio sustancial en la orografía y configuración del paisaje pasando de un entorno más bien alpino a otro con una mayor presencia de llanuras. La constante de un terreno parcelado para los almendros, viñedos y olivos será muy evidente. Estos dos últimos productos cuentan con el sello de denominación de origen.
Dejando a mano derecha Tabuenca, seguimos camino de Ambel y Bulbuente, topándonos con el río que vertebra el destino de La Ruta de la Garnacha: el Huecha. Su curso quedará impreso sobre la estampa que presenciamos gracias a su vegetación de ribera, alcanzando nuestra vista los municipios de Maleján, Ainzón, Bureta, Albeta, Alberite de San Juan, Magallón y algo más lejos las inmediaciones de Pozuelo de Aragón.
Antes de regresar al aeródromo de nuevo, cruzaremos el municipio de Borja donde podremos disfrutar de las vistas de un conjunto arquitectónico peculiar y a su vez identitario de la amplia cultura del vino que este territorio acoge: las bodegas en cerro; la Muela de Borja y por último La Estanca, un humedal que, junto a su utilidad para fines agrícolas, su importancia se acrecienta por ser lugar de paso y anidamiento de numerosas aves. Casi a nuestros pies Fréscano, Agón, Bisimbre y algo más lejos Mallén y Novillas.
Dispuestos a tomar de nuevo tierra, el municipio de El Buste, ubicado en las laderas de la Muela Alta de Borja, despedirá un apasionante viaje a “a vista de pájaro” sobre uno de los paisajes más relevantes de Aragón.
Un brindis de “altura” con vinos de la Denominación de Origen Campo de Borja y la invitación a visitar Conservas Lores, en el municipio de Bureta, con el fin de descubrir la importancia del producto gastronómico y de proximidad mediante una visita y degustación, pondrá punto final a toda una vivencia.
Haciendo frente al nuevo escenario tras el COVID-19
La Asociación para la Promoción Turística de La Ruta de la Garnacha adaptó su plan de acción 2020 en marzo con el objeto de hacer frente al escenario en el que el turismo se está moviendo actualmente reforzando, principalmente, el posicionamiento del destino junto con la búsqueda de nuevos segmentos de público.
El turismo doméstico -nacional- se encuentra en pleno crecimiento favoreciendo a los destinos de interior por el repunte de escapadas y estancias en destinos de proximidad. Esta combinación: proximidad, confianza y escapada de estancia corta son, sin duda, la fortaleza del destino de La Ruta de la Garnacha puesto que es con el que siempre ha jugado desde el minuto 0 , luchando por ofrecer un lugar mejor para “vivir”, y por lo tanto para “visitar”, incentivando el desarrollo de la actividad turística como un granito más que contribuye a la dinamización de las economías rurales.
Nuestro destino turístico, al igual que el territorio, está sujeto a medidas excepcionales como consecuencia de la Covid-19.
Por ello debe saber que cuando nos visite: museos, restaurantes, bodegas, eventos, alojamientos, etc., han podido modificar desde sus horarios, limitaciones de aforo e incluso condiciones de apertura.
A fecha de hoy, y con una situación tan cambiante, resulta imposible mantener la información actualizada día a día de todos y cada uno de los recursos del destino. Es por ello que le recomendamos que cualquier servicio que desee disfrutar a lo largo de su estancia previamente se ponga en contacto con el proveedor y confirme su intención de visita. Cualquier cambio que pudiera sufrir el mismo se lo harán saber directamente.
Quedamos a su entera disposición, sea bienvenido/a en La Ruta de la Garnacha