Tarazona es una localidad episcopal y mudéjar. Su catedral es una de las más singulares de las nueve que tiene Aragón, ya que suma al gótico primitivo el mudéjar de sus torres y cimborrio, y su fachada renacentista. Alejado de la catedral se encuentra el palacio episcopal y la iglesia de la Magdalena. Tarazona posee también una plaza de toros poligonal del s. XVIII formada por viviendas que se usan todavía. Los servicios de alojamiento y restauración de Tarazona son muy acreditados.
Como en el resto de Zaragoza, la cocina tradicional se caracteriza por emplear ingredientes sin demasiadas manipulaciones, resultando unos platos sobrios pero sabrosos. Posteriormente se han ido añadiendo sofisticaciones para lograr una cocina más actual, basada en la tradición pero más imaginativa.
Es reseñable la fiesta de San Atilano el 27 de agosto, donde un personaje conocido como “Cipotegato” es acosado con tomates. Está también muy consolidado su curso internacional de fotografía, y es famosa su antiquísima Escuela de Traductores.
Nuestro destino turístico, al igual que el territorio, está sujeto a medidas excepcionales como consecuencia de la Covid-19.
Por ello debe saber que cuando nos visite: museos, restaurantes, bodegas, eventos, alojamientos, etc., han podido modificar desde sus horarios, limitaciones de aforo e incluso condiciones de apertura.
A fecha de hoy, y con una situación tan cambiante, resulta imposible mantener la información actualizada día a día de todos y cada uno de los recursos del destino. Es por ello que le recomendamos que cualquier servicio que desee disfrutar a lo largo de su estancia previamente se ponga en contacto con el proveedor y confirme su intención de visita. Cualquier cambio que pudiera sufrir el mismo se lo harán saber directamente.
Quedamos a su entera disposición, sea bienvenido/a en La Ruta de la Garnacha